Germinados. La salud en tus manos
1 La salud en tus manos
Ana Branco, una de las pioneras en enseñar
Alimentación Viva en Brasil, impulsó el concepto de bio chips para referirse a
los germinados.
Bio Chip: Chips de computadores son moléculas de
agua que contienen silicio, las semillas también. Dentro de ellas hay
informaciones sobre la vida en la tierra. El contacto con el chip vivo recupera
el proceso creativo del humano, reconectándonos con los otros, con los animales
y con el planeta, vida que fluye dentro de las personas. La alimentación viva
tiene la noble función de reconectar al ser humano con su origen, la
naturaleza.
Las semillas contienen silicio dentro de una
molécula de agua y así como un chip almacenan informaciones que pueden ser
decodificadas por computadores. Las semillas también poseen datos fundamentales
para la raza humana y podemos tener acceso a ellos alimentándonos con vegetales
vivos y semillas germinadas. Cuando estas son expuestas a temperaturas por
encima de 45 grados, la membrana que envuelve el agua se rompe y las
informaciones almacenadas no pueden ser decodificadas.
Así cuando cocinamos las semillas, legumbres y
verduras, deleteamos las informaciones contenidas en los alimentos, ingerirlos
es como implantar un chip vacío en un computador, este va a encender, pero no
va a procesar información. Y esto genera estados de perplejidad en el ser
humano, perdemos la conexión con la Tierra.
Los alimentos cocidos desencadenan en el
organismo humano estructuras viciantes. Cada vez más el organismo desea dulces,
más ácidos y esa acidez genera euforia seguida de depresión exactamente como
sucede con las drogas. Es imprescindible traer la VIDA de vuelta a nuestra vida.
De semilla a alimento nutritivo y oxigenante
cerebral: La base de la alimentación viva son las semillas, llenas de los
nutrientes necesarios para hacer crecer una planta y cargadas de enzimas
vitales, las semillas son el corazón de la vida. Toda la energía y vida de una
planta se canalizan hacia la fabricación de sus semillas.
Cada semilla tiene vitaminas, minerales,
proteínas, grasas y carbohidratos en reserva esperando el ambiente adecuado
para comenzar a crecer. Con aire, agua y una adecuada temperatura, el milagro
comienza. Cuando la semilla germina y empieza a brotar, un increíble flujo de
energía es liberado. Se producen cambios químicos naturales en los que son
activadas las enzimas que convierten los nutrientes concentrados que están en
reserva en aquellos necesarios para que la planta crezca.
Mientras el proceso de germinación continua,
los carbohidratos son transformados en azúcares simples. Las proteínas
complejas son convertidas en aminoácidos y las grasas se transforman en ácidos
grasos, que son componentes solubles fáciles de digerir. La vitamina C, más
otras vitaminas encontradas sólo en pocas cantidades en la semilla sin
germinar, son producidas en grandes cantidades durante el proceso de
germinación. Además, las semillas absorben minerales del agua utilizada para
dejarlas en remojo y hacerlas crecer.
Los germinados son un manantial de clorofila, enzimas
y vitaminas, muy indicado en cualquier tipo de alimentación.
También son un alimento predigerido y, por
tanto, adecuado para estómagos delicados. Se comen crudos, de manera que nos
ayudan a ahorrar combustible.
La reserva nutritiva antes mencionada, de una
manera general en todos los granos y semillas, consiste en proteínas,
carbohidratos, vitaminas y sales minerales, requeridas por nuestro organismo,
para su mantenimiento y desarrollo, se la proporcionamos a través de los
alimentos.
Casi cualquier semilla, grano o legumbre puede
germinarse, aun semillas que comúnmente no forman parte de nuestra alimentación
como la de rábanos, alfalfa, nabo, col, etc. El sabor de los germinados es
variable.
Aminoácidos
en los germinados : Las proteínas vegetales son las de mejor calidad de
las proteínas disponibles en la naturaleza, ya que son fáciles de usar para el
cuerpo, no contienen grasas saturadas ni colesterol como las carnes. Entre los
germinados, las lentejas, son las fuentes más simples y ricas de proteínas de
alta calidad.
Los aminoácidos actúan en la sangre y en las
células formando parte de un proceso de renovación que nos rejuvenece y
prolonga la vida. Son muy importantes para muchísimas funciones del cuerpo y
sus distintos sistemas.
La deficiencia de uno solo de los aminoácidos
esenciales puede resultar en alergias, baja energía, mala digestión, baja
resistencia, falla de memoria, demencia senil y envejecimiento precoz.
Estos aminoácidos se encuentran en todos los
alimentos vivos. Lo mejor es consumir la mayor variedad posible de germinados,
ya que cada semilla, una vez germinada, contiene una diferente proporción de
aminoácidos. Los aminoácidos que contienen los germinados pueden hacer la
diferencia entre la falta de salud y niveles de energía por debajo de lo normal
y la salud en altos niveles de vitalidad.
Todas las vitaminas necesarias para la salud
son encontradas en abundancia en los germinados y alimentos vivos.
Comiendo los germinados frescos hay un
incremento en los valores nutricionales de nuestra comida. Los nutrientes de
los germinados se mantienen intactos hasta el momento que se comienzan a
masticar.
Sorprendentemente, las semillas de lentejas sin
germinar tienen muy poca cantidad de vitamina C, y sin embargo, después de
germinadas la cantidad de esta vitamina se multiplica tanto que las convierte
en una de las mejores fuentes de vitamina C. Esta vitamina es importante para
la salud de la piel, los dientes y las encías. También ayuda para el
crecimiento y el desarrollo y protege a otras vitaminas de la oxidación.
Nutricionalmente, los germinados de lenteja y
frijol verde son buenas fuentes de vitamina C. Los germinados también son una
buena fuente de minerales orgánicos, yodo, zinc, selenio, cobalto y silicio,
clorofila, son fáciles de digerir. Esto resulta favorable para estimular la
auto limpieza del cuerpo y así eliminar toxinas acumuladas por años de
alimentación industrializada, antioxidantes y enzimas exógenas. Una dieta
balanceada con gran cantidad de germinados frescos ofrece una fuente segura de
vitaminas A, C y E, previenen la oxidación de grasas en la sangre e inhiben la
formación de radicales libres en el cuerpo.
Los germinados, son la clave para un cuerpo
sano y longevo y para una vida más satisfactoria. Nos protegen de cualquier
enfermedad ya que refuerzan nuestro sistema inmunológico. Además, ayudan al
metabolismo en su función de mantenernos limpios y balanceados. Su riqueza en
enzimas, clorofila, aminoácidos, minerales y oligoelementos, las convierte en
alimentos completos que contribuyen a corregir las carencias de la alimentación
moderna. Los germinados se convierten en un alimento fácilmente asimilable
porque liberan todos los nutrientes encapsulados y mejoran el nivel nutricional
de la propia semilla.
Que germinar:
Frijolitos verdes, garbanzo, lenteja, arveja,
semillas de calabaza, ajonjolí, girasol, trigo, cebada, centeno, mijo, arroz,
hinojo, mostaza, quínoa, alfalfa, amaranto, etc.
Como germinar:
Ingredientes:
-Una taza de semillas/granos
-Un frasco plástico o de cristal limpios de unos
2 litros de capacidad
-Tul, gasa o malla y banda elástica
-1.5 de agua filtrada
-Tela oscura
Preparación:
-Colocar en el frasco de plástico o de cristal
la taza de semillas/granos, cubrir con agua las semillas, colocar el tul, malla
o gasa fijándolo con banda elástica en el frasco. Mantenerlas semillas/granos en remojo durante
8 horas o toda la noche. Colocar el frasco en un lugar cálido, donde no
tengamos que moverlo y que no le dé la luz directa.
-A las 8 horas o al día siguiente botar el agua,
sin quitar el tul, la malla o la gasa de la tapa del frasco (el agua se puede
colocar a las matas), enjuagar con agua y escurrir completamente. Dejar el
frasco con la boca del frasco hacia abajo para que termine de escurrir y cubrir
el frasco con la tela oscura, dejarlo 8 horas en un lugar cálido y que no de
luz directa.
-Después de 8 horas, enjuagar nuevamente con agua
y escurrir completamente y tapar nuevamente con la tela oscura y dejarlo
escurrir colocando el frasco boca abajo, por ochos horas más, hasta que la
radícula o raíz blanca de la semilla sobresalga, allí ya están listas para
consumir. Colocar en un envase de vidrio y guardar en la nevera.
-Usarlo en ensaladas, arepas, frituras, arroz, sopas,
como aperitivo, en batidos, jugos, en el agua que se ingiere en el día, etc.
Problemas frecuentes al germinar: Si las
semillas son viejas o están rotas, hace mucho calor, el agua es excesiva o está
contaminada, o falta de ventilación Si aparecen hongos en las semillas puestas
a germinar, es necesario descartarlas todas.
Referencias
Referencias
Excelente trabajo
ResponderEliminarExcelente artículo.
ResponderEliminarMuy buen tema de salud, la felicito.
ResponderEliminarLic. Eddwin Noguera.
Buenas tardes muy educativo el contenido, sobre todo para compartirlo con aquellos que trabajan en el área de Desarrollo Endogeno, inclusive desde nuestros hogares. Excelente.
ResponderEliminarBuenas tardes muy educativo el contenido, sobre todo para compartirlo con aquellos que trabajan en el área de Desarrollo Endogeno, inclusive desde nuestros hogares. Excelente.
EliminarProfa. María José Azuaje M.
Muy buenas tardes .
ResponderEliminarExcelente trabajo ,digno de mayor difusión para su aplicación masiva , ademas es muy sencillo de obtener en el hogar, sobre todo en estos tiempos de alto componente de inflación inducida.
Xaludos Kordiales.
Hcj
Excelente articulo. Me encantó. Hay que ponerlo en practica y difundirlo para que llegue a muchos hogares. La felicito
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